Un corto aborda el drama diario que viven los enfermos de la burbuja
22/03/2010
Víctor Moreno centra su filme en el rechazo que sufren los afectados de sensibilidad química múltiple.
Solo oler la ropa tendida en un patio puede provocar taquicardias a los enfermos de sensibilidad química múltiple, la dolencia que ha hecho algo más conocida la llamada niña de la burbuja de Valencia. Salir a la calle, los ruidos, o el olor de un producto de limpieza pueden ser una pesadilla para los afectados por esta dolencia, que prácticamente, como subraya el videógrafo pontevedrés Víctor Moreno, «no tienen vida propia».